El agua oxigenada no solo sirve para acabar con las bacterias. También es excelente para abrillantar los suelos. Mezclando un cuarto de taza de agua oxigenada con 4 litros de agua caliente en el cubo de fregar, los suelos quedarán brillantes.
Cristales y espejos son las superficies más difíciles de limpiar, pero el agua oxigenada ayuda, rociándola directamente y frotando con un paño que no deje pelusa.