Redes Sociales: MERCADO DE ALTO RIESGO

Las redes sociales se han convertido en una herramienta muy práctica para comunicarnos y conectarnos en segundos con personas alrededor del mundo, estas también sirve como plataforma de información y entre las novedades más reciente es que se convirtieron en una vía para la compra y venta de cualquier producto.

Redes Sociales

El simple hecho de visualizar todo en imágenes desde la comodidad de nuestro hogar hace que la oferta luzca más atractiva. A través de internet también solemos conseguir esos artículos que estamos buscando a precios más accesibles que en los establecimientos comerciales y por eso nos vemos en la tentación de adquirir esos productos mediante esa vía.

Fraude a la vista con las redes sociales.

La descripción del producto en la imagen, precios accesibles, una compra que podemos realizar desde nuestro teléfono y la información del vendedor en la cuenta, es teóricamente perfecto y muy fácil. Sin embargo, quién está detrás de la administración de esa cuenta, cómo confiar en el vendedor.

Algunas personas son más desconfiadas que otras y se dedican arduamente a investigar acerca de la reputación de la persona o la página que realiza la venta. Mientras que otros ante la facilidad y lo atractivo de la oferta tienden a realizar la compra antes de investigar quién se encuentra detrás del otro navegador.

Los usuarios de las plataformas digitales, en su mayoría aseguran que el fraude se visualiza mayormente en paquetes turísticos con descuentos que conseguimos a través de publicidades que suelen aparecer cuando visitamos otros sitios en la web.

Por eso ante la demanda de ofertas y el crecimiento de la población en redes sociales, es necesario saber cómo no ser estafado por estos cyberladrones y en caso de adquirir productos mediante internet, hacerlo con páginas confiables y que nos brinden seguridad de la compra a realizar.

Facebook, instagram y whatsapp son las redes sociales con mayor tráfico de personas, en ellas pueden encontrar cualquier información falsa y por lo tanto ventas fraudulentas, pero cómo impedir que nos estafen por internet.

DESMONTAR LA ESTAFA.

  1. Una vez que visualices la oferta a través de las redes sociales o internet debes conocer su origen. Recuerda que ninguna empresa internacional realiza sorteos aleatorios y menos sin notificarlos por sus canales de comunicación oficial. Por ejemplo: Samsung regala 100 teléfonos sólo con enviarnos tus datos y dirección de domicilio.
  2. Contexto de la oferta, esto no sólo aplica para la compra y venta de artículos sino que además para mensajes que nos llegan de manera viral a nuestro correo. Un ejemplo de esto serían los mensajes que nos llegan del banco. Si una institución nos enviará una oferta especial, esta será remitida con formalidad, además de que nuca solicitarán nuestros datos personales por esa vía.
  3. Busca a través de la administración de la cuenta la reputación de la persona a la que le vas a depositar el dinero para proceder a la compra. Dedica algunos minutos para leer los comentarios que puedas conseguir sobre la página y los puntajes que los usuarios le realizan a la misma.
  4. No permitas que juegues con tus emociones, ya que en la mayoría de las ocasiones estos cyberladrones tienen a colocar mensajes sentimentales para que las personas en su intento de ayudar caiga en la red de estafa. Un ejemplo de esto sería solicitando dinero para ayudar a un enfermo o algún animal en situación de calle.
  5. No ingreses tus datos personales en cupones que te aseguran la oportunidad de un viaje a ese destino que deseas a bajos costos.
  6. Desconfía de las promociones que luzcan perfectas y económicas, de los perfiles con baja cantidad de seguidores, de páginas que no actualicen con regularidad, de aquellos administradores que usen fotos plagiadas para promocionar sus productos.
  7. Por otro lado, si ya fuiste estafado recurre a los organismos competentes de seguridad de tu jurisdicción y realiza la denuncia de este. Recuerda que mientras más voces alcemos, más fácil será desmantelar las bandas de estafadores que circulan a través de las redes sociales o de internet.

Después de todo, las ventas fraudulentas o estafas en la red no sólo perjudican a la persona que perdió su dinero, sino también dañan la reputación de aquellos negocios o emprendimientos que trabajan con verdadera honestidad.